El tórax alberga dos pulmones, uno en el lado derecho y otro en el izquierdo. Cada pulmón está constituido por varias partes, llamadas lóbulos. El pulmón es blando y está protegido por la caja torácica, formada por las costillas. La función de los pulmones es proporcionar oxígeno al organismo y eliminar el dióxido de carbono. El oxígeno es un gas que nos aporta energía, mientras que el dióxido de carbono es un producto de desecho del organismo.
Fuente: European Lung Fundation (https://www.europeanlung.org/es/)